Reglas 10 a final
Video Text
Regla 10: Aplica el modelo de Kano simplificado.
El modelo de Kano nos propone que hay distintas categorías de características
Los elementos imprescindibles: por ejemplo, es imprescindible que un hotel tenga toallas en una habitación para cada persona o que la habitación esté limpia.
Elementos de valor lineal.
Nos gusta más que haya 5 toallas que 4 en nuestra habitación, que sobre alguna, sobre todo lo valoras si vas con niños o te gusta hacer deporte.
Pero nos da igual que haya 250 toallas en el baño.
Es más, nos molestarán 250 o preocupará mancharlas.
Elementos indiferentes: da igual si las paredes son de un color u otro o si se abre con una llave electrónica o metálica.
Elementos de entusiasmo o noticiables.
Si las habitaciones tienen un jacuzzi gigante debajo de la cama, es posible que todos los clientes publiquen fotos en sus redes sociales, y nos promocionen gratis, o que quieran volver con sus parejas.
Una casa rural no muy buena pero con una piscina cubierta posiblemente se llene mucho más que una casa buena sin ella. Es algo noticiable, que cuentas a los amigos. ¡Marketing gratuito!
Elementos de rechazo: por ejemplo carteles inapropiados en las paredes, o un trato desagradable en recepción, pueden arruinar un negocio.
En nuestra carrera profesional podemos mapear todos estos elementos del modelo de Kano:
Imprescindible es una formación base y que hablemos bien inglés, y no me refiero a tener un título.
Lineal es tener estudios técnicos y de empresa, lo que ayuda a tener un perfil en T. La polimatía es un gran valor.
Detalles de nuestra carrera pueden ser noticiables: un blog, miles de seguidores en redes sociales o ser experto en elementos novedosos o atípicos.
Y hay que procurar no provocar rechazo: aunque el mundo cada vez tiene unas normas más relajadas, algunas prácticas parecen arriesgadas, como  tatuarse el cuello o la cara, ir a una entrevista en chándal o con aspecto descuidado.
Si mandases un curriculum a una oferta donde ya lo han mandado 200 personas ¿por qué se quedarían con el tuyo? ¿eres noticiable?
Regla 11: No dejes cadáveres en el armario.
Lo que compartes en redes sociales posiblemente no desaparezca nunca.
Enviar fotos desnudo, grabarte borracho, cometiendo pequeños delitos, gamberradas o imprudencias, no parece demasiado sensato.
Ni siquiera confíes estos vídeos o fotos comprometidos a gente aparentemente cercana.
El exceso de ego puede ser un gran problema y estoy seguro  de que la mayoría de los problemas que he tenido históricamente han venido por ese camino, el ego.
Hay un ejemplo fácil de entender: imagina que vas a cruzar un paso de cebra y que viene un coche muy rápido.
Puedes decidir pasar, porque es tu derecho: tendrías razón pero también tendrías poco éxito, porque te atropellarían.
Debemos plantearnos siempre si nuestro curso de acción está en una vía o en la otra: la de la razón o la del éxito.
Tratar de ganar todas las discusiones o reuniones, decir lo primero que nos viene a la cabeza sin plantear las consecuencias no parece muy maduro.
Y nos puede crear muchos problemas, aunque a primera vista nos creamos triunfadores.
Invito a la gente que siempre que vaya a hacer algo impulsivo se imagine elevado a dos metros sobre el cielo, viendo la situación en perspectiva, y analizando las motivaciones y consecuencias.
Regla 12: Permítete cambiar tus reglas según maduras.
Cualquier persona puede echar de menos reglas o sobrarle alguna.
Ser buena persona y tratar a todo el mundo bien es algo que no debería considerarse una regla sino un modo de vida.
El cerebro tampoco tiene una capacidad infinita de recordar tantos conceptos, hay que limitar y jerarquizar principios y valores.
12 reglas parece un buen número. 
Me he centrado mucho inicialmente en la faceta económica del éxito y no tanto en conceptos relacionados con la búsqueda del sentido de la vida, la espiritualidad o el legado, que no habría que dejar fuera en revisiones futuras de reglas.
Te tienes que conceder el derecho de pensar que, dentro de un tiempo tu visión del mundo y tus principios pueden cambiar, que casi seguro le pasará al poseedor de una mente inquieta.
También hay que ser consciente que las malas reglas y decisiones tempranas pueden no ser recuperables.
Y yo, que tengo un hijo de 20 años ¿qué plan le propondría?
Obviamente mi hijo puede hacer lo que quiera con su vida.
Además, por serendípia, el camino te suele encontrar a tí antes que tu al camino.
Mis propuestas son sencillas:
Terminar la carrera, que ahora está en tercero.
Muchas veces la carrera da casi igual porque algunas de las profesiones del futuro todavía no se han inventado o van a cambiar radicalmente con los avances de la inteligencia artificial.
Tiene que desarrollar marca personal, generando contenido. Hay que mezclar contenido personal y profesional porque somos indivisibles.
Es aconsejable acumular contactos en LinkedIn, añadiendo a todo el que vaya conociendo, lo que le hará mantener el contacto vivo.
Que perfeccione su nivel de inglés durante el verano, estudiando y trabajando en el extranjero.
Que haga un master, en el mejor sitio donde le admitan, fuera de España y de nuevo en inglés.
Que trabaje en una empresa grande y exigente, que sufra entornos competitivos y modelos maduros de organización.
Sudar la camiseta se recuerda toda la vida. No hay nada peor que tener un primer trabajo cómodo y poco exigente, es algo contraintuitivo.
Que cambia a otra empresa similar a los 2 o tres años, esté cómodo o no.
Para que pueda reinventarse. Quien te ha conocido de aprendiz suele verte toda la vida como aprendiz.
Tiene que elegir una disciplina del conocimiento novedosa y de potencial crecimiento.
Lo nuevo es nuevo para todo el mundo y se compite con menos gente.
Que construya alianzas con compañeros y amigos por el camino. Si quieres llegar rápido ve solo, si quieres llegar lejos, ve acompañado.
Si te haces arquitecto compites con estudios afamados y profesionales que te llevan décadas de ventaja. Aún así podrías tratar de competir introduciendo nuevas técnicas.
Si aprendes inteligencia artificial o nuevas tecnologías aplicadas ¿con quién compites, si cambia todos los días?
Después de unos años trabajando, que estudie otro master de lo que realmente le guste y a lo que se quiera dedicar.
Que cree su propia empresa. Nunca aprenderá tanto como siendo su propio jefe. Se puede empezar por aquí pero te pierdes conocimiento valioso.
El capital antes creaba grandes desigualdades. Sigue sucediendo pero, como en mi caso que estudié en colegio, instituto y universidad pública, actualmente hay más oportunidades.
Ahora lo que creará grandes oportunidades será una buena formación, lo que también requiere un alto sacrificio personal.
La pena es tener acceso a esa formación, que a muchos les gustaría y no pueden, incluso por la distancia a núcleos urbanos, y no ser capaz de aprovecharla.
Obviamente no todo el mundo ni lo entenderá, ni se lo podrá permitir, ni lo verá imprescindible.
Pero hay cosas que nunca estorban. Una buena formación nunca sobra.
¿Y esto es alguna garantía de éxito? No, pero es comprar muchas papeletas para el éxito. Realmente no tanta gente estará dispuesta a hacer ese esfuerzo por lo que no competirás con tantos.
También pueden pasar muchas cosas buenas y malas por el camino: descubrir que este no es su camino y emprender otro, encontrar una pareja en otro país y decidir cambiar de vida, un accidente o cambio de condiciones de salud o económicas, etc.
Las apuestas no son nada más que eso, apuestas. Supongo que los padres o amigos tenemos cierta obligación de proporcionar guía, aunque posiblemente desde unos ojos algo anticuados.
Lo importante es la dirección, no la velocidad. Lo importante es el modelo.
Esto se puede hacer en 5 o 6 años o en 15.
Despedida
Como se suele decir, el sentido común es el menos común de los sentidos.
Espero que algunas de estas ideas os hayan gustado, aunque os advierto que sin la acción todo se queda en intenciones inútiles.
Lo importante no es lo que sabes, sino lo que haces con lo que sabes.
La técnica del escalador es muy adecuada para avanzar en la vida.
Los campos base se numeran de la cima hacia abajo.
Podemos centrarnos en llegar al siguiente campo base sin perder la perspectiva de que el objetivo es llegar a la cima.
Algunas veces llegar al aeropuerto ya dice mucho de la persona. En cada campo base podemos preguntar a los que bajan qué tal les ha ido.
Nunca debemos contagiarnos de la frustración del que baja sin haberlo conseguido ni de la euforia y simplificación del que tubo éxito.
Todo éxito requiere mucho esfuerzo y constancia, un plan de vida útil. Aquí os he hecho algunas propuestas que espero que os ayuden a construirlo.
Os invito a contactarme y comentar lo que queráis tanto en X, @rcanalesmora, como en Linkedin, rcanales.
Si visitáis adictosaltrabajo.com podréis encontrar muchos comentarios de libros interesantes. 
Nada me haría tanta ilusión como que alguien me contacte y me diga que algo de lo que cuento cree que le valió.
Nos vemos por las redes o por los caminos.
Haced una foto a este QR si queréis más vectores de contacto.